Proponen el inicio de las causas de beatificación del Negro Manuel y el padre Salvaire
Lunes 9 May 2016 | 11:43 am
Buenos Aires (AICA): El arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Mario Aurelio Poli, presidió este domingo la misa de la Ascensión del Señor en la catedral metropolitana, donde se anunció formalmente el inicio de las causas de beatificación del Negro Manuel y el padre José María Salvaire, considerados los apóstoles y servidores de la Virgen de Luján, patrona de los argentinos. En la homilía, el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani SDB, destacó las “varias razones” que fundamentan la convicción de que ambos “vivieron y murieron en santidad”. El prelado mercedino celebró misa con esta misma intención en la basílica de Luján.
El arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Mario Aurelio Poli, presidió este domingo la misa de la Ascensión del Señor en la catedral metropolitana, donde se anunció formalmente el inicio de las causas de beatificación del Negro Manuel y el padre José María Salvaire, considerados los apóstoles y servidores de la Virgen de Luján, patrona de los argentinos. La celebración eucarística estuvo concelebrada por el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani SDB, en cuya jurisdicción eclesiástica se abrirá el proceso canónico para la beatificación del laico esclavo y el sacerdote vicentino; el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig; el obispo de San Rafael, monseñor José María Taussig; el obispo auxiliar de Buenos Aires, monseñor Juan Carlos Ares y unos 20 sacerdotes.
“Esa presencia íntima y amorosa de Jesús en sus discípulos fue también una realidad en los corazones ardorosos y misioneros del Negrito Manuel y el padre Salvaire. Cada uno en su tiempo no hicieron otra cosa que, movidos por el Espíritu Santo, anunciar a Jesús ayudados por la gracia maternal de la Virgen, a quien le profesaron particular devoción y fidelidad”, destacó en la homilía monseñor Radrizzani.
“El primero como testigo privilegiado del milagro de la detención de la carreta a orillas del río Luján, allá por 1630, manteniendo el culto a Nuestra Señora. El segundo, el padre Salvaire, en la segunda mitad del siglo XIX haciéndola conocer y venerar por los argentinos ofreciendo la basílica que hoy custodia su sagrada imagen”, agregó.
El prelado detalló que “varias razones fundamentan la convicción de que vivieron y murieron en santidad: El corazón del Negro Manuel, laico, casado y con hijos; el de Salvaire, sacerdote de vida comunitaria y votos religiosos, desbordante de compromiso evangelizador y una gran piedad mariana”.
Al finalizar la misa, los obispos y la comunidad se trasladaron al altar de la Virgen de Luján, donde se hizo el anuncio del pedido oficial de la beatificación del Negro Manuel y el padre Salvaire. Allí prestaron juramento los postuladores de las causas, los miembros de la comisión histórica.
En la basílica
Monseñor Radrizzani presidió por la tarde dos celebraciones eucarísticas con el mismo objetivo en la basílica de Luján: Una con los peregrinos a las 17 y otra a las 19 con la comunidad parroquial.
"Recién estamos en la primera etapa de un largo camino que recorreremos juntos, ofreciendo nuestras oraciones y cuanto podamos hacer para difundir estas nobles y santas causas; y para que ellas prosperen con la dicha de verlos beatos. Confiemos que ese día llegará, si la voluntad del Señor se manifiesta en tal sentido", afirmó.
"Tanto el Negro Manuel como el padre Salvaire fueron manifestación viva del tierno amor a la Virgen de Luján, devorados de un santo celo para procurar su mayor gloria; y sembradores de las obras de misericordia proclamadas por Jesús, como camino seguro para alcanzar el cielo", subrayó.
Festejos cívico-religiosos
El rector de la basílica, presbítero Daniel Blanchoud, encabezó la procesión desde la rotonda de la avenida Nuestra Señora de Luján, que fue acompañada por la banda de la Gendarmería mientras los gendarmes vestidos de gala llevaban la imagen mariana.
Luego en la basílica monseñor Radrizzani presidió la misa en la que se formalizó el proceso para la beatificación del Negro Manuel y el padre Salvaire.
Los sacerdotes del santuario nacional destacaron que durante el fin de semana se repartieron más de 20.000 estampas con trozos del manto de la Virgen de Luján, que fue cambiado en el inicio de las fiestas patronales y del rezo de la novena.
El sábado 7 de mayo, desde las 20, se realizaron los tradicionales piropos a la Virgen esperando el día de la Madre, en la que participaron gran número de artistas locales. Los piropos comenzaron con la bendición de monseñor Radrizzani.
A las 22 el padre Blanchoud realizó la primera vista a la página web del santuario, www.basilicadelujan.org.ar, el proyecto que responde al objetivo del área de prensa y medios de comunicación de la basílica de “llegar a todos los hogares”.
A la hora cero del domingo, la comunidad lujanense le cantó el Feliz Cumpleaños a la Virgen.
En el Complejo Museográfico Provincial Enrique Udaondo, de la ciudad de Luján, se realizó este domingo una sesión especial del Concejo Deliberante de Luján en honor de la Virgen y se reabrió la Sala Capilla e inauguró la exposición “Las advocaciones de María”.
Entre las autoridades se encontraban presentes el intendente de Luján, Oscar Luciani; el rector de la basílica, presbítero Daniel Blanchoud, concejales, funcionarios y vecinos.+
Lunes 9 May 2016 | 11:43 am
Buenos Aires (AICA): El arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Mario Aurelio Poli, presidió este domingo la misa de la Ascensión del Señor en la catedral metropolitana, donde se anunció formalmente el inicio de las causas de beatificación del Negro Manuel y el padre José María Salvaire, considerados los apóstoles y servidores de la Virgen de Luján, patrona de los argentinos. En la homilía, el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani SDB, destacó las “varias razones” que fundamentan la convicción de que ambos “vivieron y murieron en santidad”. El prelado mercedino celebró misa con esta misma intención en la basílica de Luján.
El arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Mario Aurelio Poli, presidió este domingo la misa de la Ascensión del Señor en la catedral metropolitana, donde se anunció formalmente el inicio de las causas de beatificación del Negro Manuel y el padre José María Salvaire, considerados los apóstoles y servidores de la Virgen de Luján, patrona de los argentinos. La celebración eucarística estuvo concelebrada por el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani SDB, en cuya jurisdicción eclesiástica se abrirá el proceso canónico para la beatificación del laico esclavo y el sacerdote vicentino; el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig; el obispo de San Rafael, monseñor José María Taussig; el obispo auxiliar de Buenos Aires, monseñor Juan Carlos Ares y unos 20 sacerdotes.
“Esa presencia íntima y amorosa de Jesús en sus discípulos fue también una realidad en los corazones ardorosos y misioneros del Negrito Manuel y el padre Salvaire. Cada uno en su tiempo no hicieron otra cosa que, movidos por el Espíritu Santo, anunciar a Jesús ayudados por la gracia maternal de la Virgen, a quien le profesaron particular devoción y fidelidad”, destacó en la homilía monseñor Radrizzani.
“El primero como testigo privilegiado del milagro de la detención de la carreta a orillas del río Luján, allá por 1630, manteniendo el culto a Nuestra Señora. El segundo, el padre Salvaire, en la segunda mitad del siglo XIX haciéndola conocer y venerar por los argentinos ofreciendo la basílica que hoy custodia su sagrada imagen”, agregó.
El prelado detalló que “varias razones fundamentan la convicción de que vivieron y murieron en santidad: El corazón del Negro Manuel, laico, casado y con hijos; el de Salvaire, sacerdote de vida comunitaria y votos religiosos, desbordante de compromiso evangelizador y una gran piedad mariana”.
Al finalizar la misa, los obispos y la comunidad se trasladaron al altar de la Virgen de Luján, donde se hizo el anuncio del pedido oficial de la beatificación del Negro Manuel y el padre Salvaire. Allí prestaron juramento los postuladores de las causas, los miembros de la comisión histórica.
En la basílica
Monseñor Radrizzani presidió por la tarde dos celebraciones eucarísticas con el mismo objetivo en la basílica de Luján: Una con los peregrinos a las 17 y otra a las 19 con la comunidad parroquial.
"Recién estamos en la primera etapa de un largo camino que recorreremos juntos, ofreciendo nuestras oraciones y cuanto podamos hacer para difundir estas nobles y santas causas; y para que ellas prosperen con la dicha de verlos beatos. Confiemos que ese día llegará, si la voluntad del Señor se manifiesta en tal sentido", afirmó.
"Tanto el Negro Manuel como el padre Salvaire fueron manifestación viva del tierno amor a la Virgen de Luján, devorados de un santo celo para procurar su mayor gloria; y sembradores de las obras de misericordia proclamadas por Jesús, como camino seguro para alcanzar el cielo", subrayó.
Festejos cívico-religiosos
El rector de la basílica, presbítero Daniel Blanchoud, encabezó la procesión desde la rotonda de la avenida Nuestra Señora de Luján, que fue acompañada por la banda de la Gendarmería mientras los gendarmes vestidos de gala llevaban la imagen mariana.
Luego en la basílica monseñor Radrizzani presidió la misa en la que se formalizó el proceso para la beatificación del Negro Manuel y el padre Salvaire.
Los sacerdotes del santuario nacional destacaron que durante el fin de semana se repartieron más de 20.000 estampas con trozos del manto de la Virgen de Luján, que fue cambiado en el inicio de las fiestas patronales y del rezo de la novena.
El sábado 7 de mayo, desde las 20, se realizaron los tradicionales piropos a la Virgen esperando el día de la Madre, en la que participaron gran número de artistas locales. Los piropos comenzaron con la bendición de monseñor Radrizzani.
A las 22 el padre Blanchoud realizó la primera vista a la página web del santuario, www.basilicadelujan.org.ar, el proyecto que responde al objetivo del área de prensa y medios de comunicación de la basílica de “llegar a todos los hogares”.
A la hora cero del domingo, la comunidad lujanense le cantó el Feliz Cumpleaños a la Virgen.
En el Complejo Museográfico Provincial Enrique Udaondo, de la ciudad de Luján, se realizó este domingo una sesión especial del Concejo Deliberante de Luján en honor de la Virgen y se reabrió la Sala Capilla e inauguró la exposición “Las advocaciones de María”.
Entre las autoridades se encontraban presentes el intendente de Luján, Oscar Luciani; el rector de la basílica, presbítero Daniel Blanchoud, concejales, funcionarios y vecinos.+
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