Conmoción en La Rioja por la caída del Cristo de la Hermandad

Conmoción en La Rioja por la caída del Cristo de la Hermandad 
 Jueves 26 Mar 2015 | 09:53 am
 Mons. Colombo, en una reciente misa frente al Cristo.

La Rioja (AICA): El obispo de La Rioja, monseñor Marcelo Colombo, expresó su tristeza y conmoción por la caída del Cristo de la Hermandad, la imagen que se levantaba en el predio municipal conocido como el “Solar de la Fe”. El prelado rechazó declaraciones políticas que consideró “desafortunadas y erróneas” y denunció que “desde mucho tiempo atrás, los vecinos del barrio y el Obispado han venido haciendo, infructuosamente, presentaciones para que se trabajara en el mantenimiento del Cristo”. Presidió una misa, en la que subrayó “que, más allá de nuestras miserias, Dios nos invita a crecer y madurar en la fe”. 

 El obispo de La Rioja, monseñor Marcelo Colombo, expresó su tristeza y conmoción por la caída del Cristo de la Hermandad, la imagen que se levantaba en el predio municipal conocido como el “Solar de la Fe”.
 “Escuché conmovido a un joven de la comunidad expresar su desazón y la indiferencia con la que muchas veces pasamos frente al Señor de Yacampis. Decía con palabras muy sencillas pero muy firmes que nos tenemos que dejar cuestionar por esta caída y rezar con Él, acompañándolo como María, al pie de la Cruz. Ese joven hablaba desde su dolor pero entreabría la puerta del corazón a la esperanza. Juntos podemos recuperar a nuestro Cristo. Juntos podemos estar a sus pies y rezar con Él por todos nuestros hermanos”, escribió en un mensaje a la comunidad.
 Frente a declaraciones políticas que consideró “desafortunadas y erróneas”, el prelado recordó que el Solar de la Fe, donde se encuentra la imagen, es “un predio de propiedad municipal” que fue concedido al Pueblo de La Rioja desde el 16 de abril del Año Santo 2000.
 Monseñor Colombo denunció que “desde mucho tiempo atrás, los vecinos del barrio y el Obispado han venido haciendo, infructuosamente, presentaciones para que se trabajara en el mantenimiento del Cristo”.
 “Queremos como sociedad comprometernos con Cristo y volver a poner un día su imagen restaurada. Pero vamos a rezarlo juntos. Vamos a pedirle fuerzas al mismo Señor para hacerlo”, agregó.
 Por eso, monseñor Colombo presidió este miércoles, festividad religiosa de la Anunciación del Señor, una misa en la que destacó que “el Cristo de Yacampis, el Señor de la Hermandad nos habla del triunfo de la Vida por sobre la muerte y el pecado” y aseguró “que, más allá de nuestras miserias, Dios nos invita a crecer y madurar en la fe”.
 Oración ante el Cristo 
 El obispo Marcelo Colombo dirigió estas palabras en forma de oración a la imagen yacente del Cristo de la Hermandad:
 Jesús, Cristo de la Hermandad y Señor del Yacampis, has querido abrazar nuestra tierra riojana con todo el peso de tu amor crucificado. El estrépito de tu caída acalla nuestras palabras vacías para llenarnos con la elocuencia de tu entrega. 
 Allá en tu tierra natal, hace casi dos mil años, has querido cargar de una vez y para siempre, nuestros pecados, indiferencias, vacilaciones y ambigüedades. Y hoy nos lo recuerdas con todo el vigor de este gesto. 
 Antes habías llorado por tu ciudad, Jerusalén, que no quería reconocer tu venida y te perseguía, enfrascada en los juegos políticos y leguleyos de sus dirigentes alejados de los dolores de los pobres, que te repartiría entre Herodes y Pilatos, después de aclamarte un día como Rey y Señor, para días más tarde, escupirte, ultrajarte y lacerar tu cuerpo, como a un ladrón. 
 Hoy estamos con vos. Y te contemplamos, conscientes del compromiso que esto encierra. No queremos quedarnos en una mirada piadosa pero religiosamente estéril de tu impulso y decisión de dar Vida y Vida en abundancia. 
 Yacente en los brazos de nuestra tierra riojana, nos invitas a elegirte, a hacerte definitivamente nuestro, a trascender el llanto y la pasividad para consolar al hermano, salir al encuentro de quienes caminan en las sombras de las adicciones y de los que no logran vislumbrar un mañana porque el hoy los agobia y aplasta… 
 Las distintas formas de violencia instaladas en nuestra sociedad nos hacen extranjeros en nuestra propia casa. Y vos la abrazás para que no escapemos, para que la hagamos nuestra, para que salgamos de nuestros desencuentros y la habitemos, para que sea Tierra de Dios y de todos y cada uno de los riojanos. 
 En este Tinkunaco tuyo con nuestra tierra riojana, no queremos dejarte solo Señor. Estamos con vos, para resucitar en cada nuevo amanecer, para salir del fracaso de la soledad y el individualismo, para mirar limpiamente a los demás, buscando el bien del hermano, del vecino, del lejano, para trabajar y ganar honestamente el sustento con nuestro propio esfuerzo y para ser verdaderamente libres. 
 Resucítanos con tu amor corajudo y fiel. Danos la audacia perseverante de buscar la Vida, la Verdad, la Justicia, la Libertad, la Fraternidad y en ellas a tu Reino Señor, a Vos mismo. Para no dejarte nunca más.+